Se conmemora el 40 aniversario del barrio de Buenos Aires (Salamanca). Una comunidad que lucha contra la indiferencia, la hostilidad y el prejuicio de un entorno demasiado centrado en darse la espalda a sí mismo.
Colaboro junto a Clara Lurueña, Reyes Fonseca, Ferchu de Castro, José María Benéitez y Emiliano Tapia en el diseño y materialización de la pancarta-mural que se ha realizado gracias a ASDECOBA en sus diversas vertientes, la implicación de los vecinos del barrio y quienes han puesto su granito de arena en esta invocación.
Formo parte de la Asociación Vía Oeste. La fundamos seis personas en 2021: Hugo Calvillo, Jorge Páez, Eduardo Rodríguez Sánchez-Bordona, Ainhoa Urcelay, Joaquín Mayordomo y yo. El objetivo es combinar arte y naturaleza en el entorno del Campo Charro y Las Arribes del Duero, al Oeste de la provincia de Salamanca.
Estamos recibiendo la cooperación de algunos ayuntamientos y ya estamos materializando la primera ruta senderista homologada de Villavieja de Yeltes: Vía Villavieja.
Caseta del guarda en la dehesa pública
Eduardo con su proyecto Vidas y Paisajes Desaparecidos y yo con mi serie mural Ilex Umbra estamos en pleno proceso creativo. Me siento bien yendo a trabajar a un pueblo que coincide en una visión ecologista del desarrollo humano, social y cultural.
Pruebas de oxidación y transferencias de Eduardo Rodríguez Sánchez-BordonaOxidaciones sobre plancha de hierro de EduardoEncaje de dibujo en mural serie Ilex UmbraProceso en mural serie Ilex Umbra
El sábado 22 de abríl varios integrantes del equipo de El Cuchitril estuvimos dando vida a un cadáver exquisito en el barrio del Oeste, Salamanca, dentro del marco de Galería Urbana 2023. Una convocatoria promovida por ZOES que cuenta ya con 12 ediciones.
Intervenimos: Chema Alonso, Tim de Coma, Eduardo Rguez. Sánchez-Bordona, Raquel Barbero, Juan Daniel Elorza, Aída Rubio, José María Benéitez y yo entre otros.
Queremos que este cadáver sea una pared viva y mutante, que sirva de cuaderno de apuntes y medio de expresión para artistas, no artistas, ya no artistas y todavía no artistas.
Este sábado, 13 de Mayo, impartiremos David de la Mano y yo un taller de graffiti relacionado con las marcas de cantero en Villamayor. Promovido a través de Asociación La Pica.
Junto a Clara Lurueña, colaboramos con el III Salón del libro infantil y juvenil de Salamanca, pintando el escaparate de la librería La Caraba. Organizado por Asociación La Sal.
El Salón se puede visitar hasta el 27 de noviembre en la biblioteca municipal Torrente Ballester y otros escenarios. Toda la información en la página de la asociación.
En palabras de Dosjotas: Monopoly Urbano relaciona acciones artísticas en el espacio público de forma independiente e incluso ilegal, con las rutinas comerciales en el mercado del arte y la compra-venta de inmuebles, creando un paralelismo entre el arte urbano y la especulación inmobiliaria, enfatizando las contradicciones del mercado del arte y la utilización de los artistas con objetivos mercantilistas.
Del 16 de septiembre al 12 de noviembre de 2022 en Swinton Gallery. Más información sobre todas las fases del proyecto en el blog de Dosjotas.
MURAL EN COCREACIÓN CON LOS ALUMNOS DE FUNDACIÓN AFIM SALAMANCA
Este proyecto nació hace un año cuando me propusieron visitar a un grupo de personas muy unido. Cuando conocí a los alumnos, profesionales, alumnos en prácticas y voluntarios de la Fundación AFIM Salamanca noté que eran expertos en hacer las cosas con respeto, disciplina y cariño entre ellos y con los demás.
Ellos dicen: “No somos avestruces, nos gusta levantar la cabeza y mirar alrededor.” Creo que esta fórmula indica claramente que este grupo de personas afronta con valentía y decisión los retos (a veces tan difíciles) que nos plantea la vida. “Queremos pintar la fachada de nuestro local” dijeron. Así nació el proyecto Los Senderos, ideado en colaboración con Cristina Jimeno Carril, para reflejar la idea de que una comunidad funcional se relaciona, es orgánica, se une, se dispersa, piensa y actúa con libertad sin dejar de mirar alrededor para que nadie se quede solo.
Ilustración de Cristina Jimeno Carril
El punto de partida fueron los conocidos dibujos que realizó Santiago Ramón y Cajal para ilustrar cómo son las células neuronales y de qué manera transmiten y reciben información.
Neurona piramidal. Ilustración de Santiago Ramón y CajalIlustración de Santiago Ramón y Cajal
Entonces nos centramos en ensayar sobre papel nuestra particular idea de conexión, individual y común, desde una posición metafórica.
Dibujaríamos las conexiones neuronales como sí fuesen los elementos de un mapa: caminos, ríos, fronteras, ramificaciones. Hicimos bocetos individuales y un gran boceto común en papel continuo con la pintura y los pinceles que más adelante utilizaríamos en el mural.
En este paso del proyecto nos familiarizamos con los materiales y el proceso de crear una obra común.
Unos días después, nos enfrentamos a la pared, aquí comprobamos el verdadero cambio de formato (de papel horizontal liso y suave a la pared vertical con sus múltiples relieves). En el muro tuvimos que hacer el ejercicio de alejarnos y acercarnos, adoptar una visión de conjunto a la vez que dibujábamos sobre pequeñas zonas. Hicimos nuestras particulares conexiones en dos sesiones: la primera en verde claro sobre el fondo limpio. Esta parte quedaría, al final, en segundo plano. Son los senderos menos visibles, los que dan profundidad al conjunto.
La segunda parte en verde oscuro sobre la red de senderos dibujada el día anterior. Más difícil, pues además de combinarnos entre quienes estamos pintando en ese momento, nos debemos combinar con el dibujo anterior.
Uno de los fines de este taller es acercarnos a una característica fluidez de pensamiento mientras dibujamos en una pared exterior. He comprobado en mí mismo y he compartido con otras personas que pintan murales la experiencia de formar parte activa del entorno que estamos modificando. A veces esta experiencia se traduce en una percepción más definida: oímos mejor, llegan a nuestros sentidos de forma más específica los olores, la sensación térmica, los cambios de color a medida que pasa el tiempo, percibimos el propio tiempo. A veces también sucede que dialogamos silenciosamente con nosotros mismos, damos solución a problemas que parecen muy difíciles, estamos tranquilos y concentrados mientras dibujamos. Si bien es cierto que la fluidez no es fácil de encontrar en poco tiempo, al menos hemos abierto la posibilidad de que suceda.
La última fase del proyecto en la pared fue acentuar la amalgama de conexiones creada por los alumnos y continuarla hacia las partes más altas del muro.
Este taller ha sido posible gracias a la participación de los alumnos de AFIM Salamanca. Es una realidad gracias a la colaboración y asistencia de Mila, Javi, Raquel, Ana, Irene, Celia y Ángela. Gracias, como de costumbre, a Cristina por su implicación y apoyo desde el comienzo.
Fotos: Fundación AFIM Salamanca / Pablo S. Herrero